Articipar en el curso de cuento erótico con la maestra artemisa tellez fue toda una experiencia.
La energía y pasión con que nos motivaba a expresarnos era arrolladora. Toda esa energía nos contagiaba, para luego verterla en el desarrollo del cuento.
Poco a poco Artemisa nos fue llevando de la mano para que cada una de nosotras lograra desinhibirse y así poder desarrollar un cuento que cumpliera con las expectativas del curso.
La lluvia de ideas y el proceso creativo siempre fue libre y exento de presiones por parte de Artemisa.
Cada una de las alumnas nos sentimos muy motivadas y se lograron ejercicios muy alentadores.
Artemisa nos ayudó a encontrar alternativas para enriquecer la historia a narrar, sin que ello limitara nuestra libertad, pero siempre apuntando a esforzarnos para encontrar mejores alternativas narrativas.
El curso de cuento erótico me dio la oportunidad de sumar una competencia más en la ruta del aprendizaje.
Gracias Artemisa por tu paciencia y tu excelente sentido del humor. La UNAM tiene que estar orgullosa de contar contigo.
Martha López.